Las noticias están llenas de hipótesis y posicionamientos en torno a las diferentes variantes de listas "unitarias" por el SÍ a la independencia. De "la lista del presidente", hemos pasado a la lista de ANC y Òmnium y a "la lista de la sociedad civil". Todas variantes de una misma cosa: esconder el problema de clase detrás de las banderas, e incluso en este terreno, apaciguar las exigencias de ruptura respecto a los 18 meses de la hoja de ruta de CDC, ERC, Òmnium, ANC y AMI. Las presiones sobre la CUP tienen el mismo falso razonamiento: la lista única, civil o no, da fuerza a la independencia.

Todas arrancan de la necesidad de Mas de reconducir una situación de descenso electoral después del gobierno de recortes que tampoco ha garantizado el referéndum. Soltar el lastre que suponía Unión ha sido el último golpe de efecto de Mas para dar credibilidad a que él puede gobernar la nave de la independencia. ERC ha ido y venido, según las encuestas le pronosticaban que adelantaba a CiU con el proceso en ascenso, o de tanto frenarlo y hacerle perder terreno, ahora también teme que los resultados no le sean tanto favorables y la gente recuerde como ha avalado los recortes de Mas a cambio de un referéndum que tampoco se ha hecho. Es por eso que uno y otro miran lo que hace la CUP ya que es quien ha hecho frente los recortes sin bajar las banderas nacionales. No es por la cifra, es por la política.

¿Es verdad que la unidad fortalece? No siempre. Cuando varios bueyes tiran de un carro en diferentes direcciones, el carro no siempre suma fuerzas para avanzar. Si hay quien tira en sentido contrario, en lugar de sumar, resta. Y, en todos los casos el carro avanza en el sentido del toro más fuerte. Y aquí hay toros con muchísima fuerza.

Para ello hay que tener en cuenta que cualquier lista unitaria con CDC y ERC significa la continuidad del gobierno de los últimos años de recortes. Òmnium ha dejado claro que el único punto de acuerdo es la independencia y que el nuevo gobierno seguiría gobernando sólo para esta tarea y, por tanto, el resto seguiría igual. Jonqueres ya ha demostrado que esto significa votar presupuestos, dar cobertura a consejeros como el de sanidad o interior y al jefe de los mozos, o a Felip Puig en el caso de Panrico ... Por lo tanto, se estaría votando la prórroga de este gobierno burgués. Sean 18 meses o sean 5, dos meses para convocarlas y tres más para llevarlas a cabo, es un cambio de cromos en el que la atención a las necesidades sociales se aplaza hasta conseguir la independencia. Esto ya es grave -es como justificando ERC-, pero incluso: ¿la garantiza? En el acuerdo de la hoja de ruta se dice que sí, que será unilateral en año y medio, pero mientras que hay que establecer diálogo con el Estado sobre la nueva situación y que hay que "mantener una actitud expectante respecto al alternativa de un referéndum vinculante por parte del Estado español sobre la independencia de Catalunya ". Es decir, que en realidad seguimos pendientes de los cambios en Madrid el próximo noviembre, que podrían llevar a prorrogar los plazos. También en esto, Mas y Junqueras nos han demostrado que no cumplen los compromisos mínimos que hacen, ya que el de esta legislatura era la consulta, y no lo han hecho. ¿Qué habrá cambiado por ahora fiarnos de ellos?

La propuesta de Mas, -con la cobertura de la ANC, Òmnium y AMI, todos ellos firmantes de la hoja de ruta- es una de aquellas propuestas que se publicitan para no perder -él- o ganar "sin la mayoría suficiente" y poder echar balones fuera, pero sobre todo amordazando al ala izquierda cuando esto ocurra: sea versión lista unitaria sea versión gobierno de concentración como dice ERC.

Ahora llega la propuesta que presenta Quim Arrufat, con la bendición rápida de ERC y Òmnium / ANC, que ni hemos discutido ni compartimos. De un lado acorta el plazo, pero no cambia el contenido. Por el contrario, lo refuerza con la continuidad del gobierno de Mas -ahora ya se habla si también con ERC- al menos 5 meses. Del otro, en las elecciones del 27S, empuja parte de los votantes conseguidos últimamente, que arrastrábamos detrás de la doble ruptura, a ir hacia el otro bloque, al aplazar las necesidades sociales a las siguientes elecciones. Esto no da más votos al bloque independentista, sino que resta, especialmente a la CUP y lleva estos votantes a salidas reformistas como la de ICV-Podem. Con la propuesta de la lista civil, no crecen los votos, sino bajan los de las clases populares no independentistas a las que estábamos llevando a la doble ruptura haciendo indisociables los ejes nacionales y sociales. Muchos trabajadores no votarán una lista vacía de propuestas sociales y que no deja de ser también la de CDC y ERC, por mucho que nos la quieran revestir de "sociedad civil".

Si aún así ganara la lista civil: ¿está claro que hará la DUI (Declaración Unilateral de Independencia) o sólo convocan las siguientes elecciones? Y si lo hacen ¿alguien cree que la ruptura puede ser manejada por el gobierno de Mas?. ¿Nos imaginamos al gobierno español esperando a ver qué hacemos en las segundas elecciones, las de carácter social? Si ante el 9-N ha abierto juicios, nos podemos imaginar que la represión será infinitamente superior si ve que va en serio. ¿No recordamos el encarcelamiento de todo el gobierno de ERC y la suspensión de la autonomía en el año 1934 para proclamar "el Estado catalán dentro de la República Federal Española" o de los más de 1000 alcaldes y concejales en Euskadi para convocar elecciones, por fuera la constitución, para crear una comisión que defensas el Concierto Económico? ¿Y qué herramientas tendremos con un gobierno en manos de la derecha?

Y que no se diga que la UE no lo permitiría, porque ya hemos visto permiten cosas mucho peores. Durante la guerra de Bosnia, de brazos cruzados unas veces, otras con la ONU y la OTAN, ... y ahora, en pleno siglo XXI: ¿No vemos cómo las gasta la troika con las decisiones democráticas y ampliamente tomadas por el pueblo griego? Comenzar el camino de la ruptura no es un juego: es tener una base social y desde el primer momento buscar las herramientas para defenderla ante la probable respuesta del Estado y aún más que probable complicidad/ pasividad de la UE, cosas que un gobierno Mas no puede manejar.

Imaginamos pero que, como estamos diciendo, la lista única civil pierde votos y / o se gana por una exigua mayoría o los otros partidos pueden llegar a concretar un gobierno. ¿Cuatro años por delante habiendo regalado las herramientas institucionales que tanto nos han ayudado a explicar y hacer crecer nuestras propuestas? Habremos regalado el gobierno no sólo a los unionistas diversos sino, en el mejor de los casos, la reforma de la reforma en el terreno social -versión catalana de Syriza, capaz de gestionar el triunfo de la OXI como una derrota: tercer rescate, mantenimiento en la UE e incremento del compromiso de recortes, metiendo mano a IVA y pensiones ...-... y nosotros habiendo tirado la llave al agua ?.

Por eso necesitamos posiciones claras y nítidas, porque lo que no podemos hacer es generar confusión: no con los otros partidos, sino entre la gente. No hacen falta cumbres "discretas", al contrario claridad y transparencia para ganar la confianza de los sectores populares.

Miquel Blanch y Esther del Alcázar, candidatos de Lucha Internacionalista a las primarias de la CUP-Llamada Constituyente por Girona y Barcelona respectivamente.