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EDITORIAL

El nuevo Gobierno de la Generalitat

Lucha Internacionalista, 20 de enero de 2016




Finalmente hubo acuerdo in extremis i se invistió Gobierno en Catalunya sin Mas ni su séquito (Felip Puig, Boi Ruiz, Rigau...). Gobierno presidido por Carles Puigdemont de CDC, con ERC y algunos independientes, que depende del pacto con la CUP-CC para tener mayoría parlamentaria. El resultado de las elecciones del 27S no solo era la mayoría independentista sino también un giro a la izquierda, por lo que el Gobierno Puigdemont es más débil que el anterior de Mas para poder aplicar nuevos recortes y las medidas de privatización que le exige el pago de la deuda y cumplir los déficits requeridos por el Gobierno central y la UE. Al frente de esa tarea se pone el principal activo de ERC, Junqueras, con la necesidad de acudir a Madrid a por los FLA a la vez que paralizar los movimientos sociales contra los recortes.

La renuncia de Mas a la presidencia no es el resultado de un acto de magnanimidad, sino el intento desesperado para evitar unas nuevas elecciones. ERC ya había declarado que no iría en una nueva lista conjunta y CDC –como ya ocurrió el 20Diba a quedar relegado en un lugar secundario.

Dejar caer a Mas –tras el no de la CUP-CC- era la única manera de conservar en manos de CDC la presidencia y la mayoría del Gobierno. La caída de Mas era el triunfo de las bases de la CUPCC que no se dejaron doblegar ante la presión extrema externa e interna. Baños, cabeza de lista de la CUP-CC y partidario de investir a Mas, presentó su dimisión.

Si todo se hubiera reducido al cambio de Mas por Puigdemont, nosotros hubiéramos dado el apoyo a la investidura, pero sin compromiso político, con las manos libres para combatir sus inconsecuencias en la lucha por la República Catalana, llamando a enfrentar los planes económicos que van a seguir cargando sobre las espaldas de los trabajadores/as.

Pero resulta incomprensible que, después de haber aguantado la presión casi tres meses, en el último momento la dirección de la CUP confunda la debilidad de CDC como propia, permita a Mas hacer de la debilidad virtud, y acabe pagando un precio suicida en el acuerdo con JXS.

El acuerdo JXS y la CUP-CC intenta anular todo el potencial rupturista de la CUP-CC y subordinarla a JXS y el Gobierno Puigdemon. Lucha Internacionalista llamamos a votar en contra porque no es admisible la merma de la independencia política y menos ante un Gobierno de la burguesía. Y porque cuestiona un proceso de reorganización importante como CUP-CC que había levantado esperanzas incluso entre población trabajadora que no se definía independentista.

Curiosamente en el acuerdo se critica «la beligerancia de la CUP-CC», y no porque se denunciara que el plan de choque que propone JXS son migajas, sino porque se dudaba –y con razón- de que CDC y ERC tuvieran «una voluntad inequívoca de avanzar en el proceso de la independencia» I es que el Gobierno Puigdemon seguirá justificando ante sus bases una política económica antisocial, al servicio de los intereses de la burguesía, por la falta de recursos mientras Catalunya no sea república. Pero donde se juega su 1’6 millones de votos es, si responde con firmeza los embates del Estado y avanza decididamente o no hacia la proclamación de la República catalana y no acaba retrocediendo en un Pacto fiscal. Claro, siempre y cuando pueda haber una izquierda independentista que pueda canalizar ese descontento, que es lo que JXS trata de desactivar queriendo anular la CUP-CC.

Defenderemos el Gobierno catalán ante los ataques del Estado que vayan contra el ejercicio del derecho de autodeterminación. Es necesario debatir un plan de movilizaciones para responder al Estado, incluido el llamado a la huelga general en caso de supresión del Parlament y/o el Govern, y a la solidaridad de los y las trabajadoras de los demás pueblos del estado. Pero la independencia política frente al Gobierno CDC-ERC y el combate sistemático al lado de las necesidades de los trabajadores/as no está, ni estará en juego. Y urge poner en marcha una amplia plataforma por un plan de choque, llamando a organizaciones, movimientos, sindicatos... para definir esas necesidades y un plan de lucha.

Desde Lucha Internacionalista llamamos a las bases de la CUP-CC a garantizar la lucha por las dos rupturas que fueron la base de su formación: con el Estado monárquico, República catalana; con el capitalismo: plan de choque que atienda las necesidades más elementales de los y las trabajadoras, por el no pago de la deuda…

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