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Ha muerto Tià Salellas

Sílvia Rispau i Mercader, Miquel Blanch, 28 de mayo de 2008




Esta mañana ha muerto Tià Salellas. Abogado defensor de numerosos casos contra la criminalización de los jóvenes en las comarcas gerundenses (independentismo, antifascismo, okupas, ..) y de los inmigrantes (caso Comando Dixan) siempre estuvo disupuesto a dar una mano allá donde la lucha y el compromiso social chocaba con el estado y la represión.

Tià siempre ponía por delante su pensamiento marxista por la mejora de las condiciones de vida de los trabajadores y trabajadoras y la defensa de los derechos democráticos.

Desde hace unos cuantos años frecuentaba la participación en las listas electorales de Lucha Internacionalista. En la última iba por Lluita Internacionalista al Senado por las comarcas gerundenses. Creía en el reagrupamiento de una izquierda revolucionaria. Su actitud con LI ha sido muy sincera y sencilla, a la hora de pedirle para que se presentase a una selecciones siempre nos decía que lo hacía porque LI estaba presente en las lucha y nos quería acompanyar para construir una alternativa. Su participación en cualquier acto, por pequeño que fuera, era de una preparación cuidadosa.

Con la muerte del compañero Tià perdemos un hombre de valor y valentía intelectual, de activismo y presencia permanentee en todos los frentes de combate, transmitiendo las ideas revolucionarias.

Tià, ¡hasta el socialismo siempre!

SÍLVIA RISPAU I MERCADER

Dicen que a los compañeros de lucha no se les ha de dar las gracias. No daremos pues las gracias a Tià. Pero haremos bien desde la izquierda –desde las opciones diversas de la izquierda- en reivindicarlo como referente político, porque es patrimonio nuestro.

Tià ha estado siempre. Ha estado nuestro abogado a la hora que fuera, por el caso que fuera y sin cobrar. Estuvo en el 92 92 y siguió tozudamente hasta conseguir la condena del estado español en Estrasburgo. Ha estado en decenas y decenas de veces por desalojamientos, por pintadas, por los platos de nata, por la insumisión, por atentados a la autoridad creados por los mossos que siempre acaban con condena, por todas las denuncias de malos tratos de los mossos que, si no se archivan antes, acaban en absolución, por Núria Pòrtulas, por la quema de fotos del rey... Sin importarle quien mandaba –o quizás sí, pero haciéndolo igual– en el ayuntamiento o en las policías de Barcelona y Madrid, tanto si eran de CiU, como del PSC-PSOE como de ICV-EUiA.

Tià ha estado siempre porque era un activista, un militante. Por eso se ha dejado usar en todas las charlas y actos diversos, por eso siempre ha estado en las manifestaciones y, por eso mismo, los cinco últimos años ha querido estar en las candidaturas de Lucha Internacionalista, como una más de las formas posibles de construir una alternativa desde la izquierda revolucionaria.

Tià ha estado muy especialmente preocupado en los últimos tiempos por la inmigración, entendida como hay que entenderla, como una cuestión de clase. Seguramente por eso ha dedicado tantos esfuerzos a luchar contra la cruzada antiterrorista de Garzón y la Audiencia Nacional, que, desde el 11-S, ha trasladado el punto de mira de Euskadi al islamismo. El, sobretodo, ha sido el abogado del Comando Dixan, que con la Plataforma Paremos la Guerra es mantuvieron firmes sólo al calor de las movilizaciones contra Aznar y la guerra sino también con el gélido clima de después del 11-M. Uno de sus últimos casos ha sido el de los trabajadores pakistaníes del Raval, esta vez una operación de los Mossos d’Esquadra.

Todo esto sin que olvidara nunca ni los derechos nacionales de Catalunya ni el internacionalismo –sus viajes a Latinoamérica y a Palestina–. Ni de ser el abogado incansable que visitaba a los presos sociales los domingos –casi en ningún lugar como detrás de las rejas de las prisiones gerundenses se debe haber sentido tanto la muerte de Tià.
Tià es un referente porque siempre ha sido coherente, no ha abandonado nunca el marxismo, ni el anticapitalismo ni la convicción de la necesidad de la revolución. Tià no se ha vendido nunca ni se ha cansado de luchar nunca y, cuando se dio cuenta que su mundo político giraba a la derecha, hizo lo que es de sentido común aunque sea lo menos habitual, mirar hacia la izquierda. En nuestra tradición nos despedimos de los compañeros comprometiéndose a seguir luchando: compañero Sebastià Salellas, ¡hasta el socialismo, siempre!

Mor Sebastià Salellas, lluitador i defensor de causes perdudes - EL PUNT

I ara, qui ens farà de Tià? - JORDI GRAU

Mor l’advocat empordanès Sebastià Salellas - AVUI

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