El pasado 17 de enero, la alcaldesa de Madrid Manuela Carmena anunciaba que se aliaba con el candidato de Unidos Podemos, Iñigo Errejón, para presentarse por la candidatura electoral Mas Madrid en las elecciones Autonómicas en la Comunidad de Madrid. A renglón seguido Pablo Iglesias situaba a Errejón fuera de Podemos y anunciaba que Podemos e IU se presentarán con candidatura propia en las elecciones en la comunidad madrileña. La candidatura municipal Más Madrid saltaba así del ámbito municipal al autonómico.

En una carta conjunta, Carmena y Errejón nos recuerdan que la «democracia es un gran regalo colectivo, hay que cuidarla y comprometerse con ella, en España y en Madrid existe una mayoría demócrata y progresista que no quieren que arrastren al enfrentamiento y al retroceso. Pero una buena parte de esa mayoría necesita un proyecto que renueve su ilusión y confianza en que las cosas se pueden hacer todavía mejor. Para ello hay que abrir y sumar yendo más allá de las siglas: las fuerzas políticas del cambio son necesarias, la ciudadanía, y su creatividad son imprescindibles. Nos encontramos ante un momento decisivo, Andalucía ha sido un toque de atención, hoy todo el mundo sabe que necesitamos un revulsivo».

Errejón y Carmena nos recuerdan la desilusión generada por Podemos, pero no dicen nada de la que generan los «Ayuntamientos del cambio». Todo esto podría ser muy lógico si no fuera porque Iñigo Errejón era el candidato de Unidos Podemos a la Comunidad de Madrid, votado en las primarias de esta formación en mayo de 2018. Errejón, en declaración a la Cadena Ser y emulando a Guaidó en Venezuela decía, que era el candidato de Unidos Podemos a la Comunidad de Madrid el 18 de enero y a la vez iba a concurrir de la mano de Manuela Carmena.

El lector de este artículo puede pensar que Carmena tiene todo el derecho del mundo de alcanzar a un acuerdo con Errejón o con quien quiera, por supuesto, no faltaría más. Pero hay que recordar que Carmena fue elegida alcaldesa de Madrid con la coalición Ahora Madrid que fue un amplio acuerdo entre Podemos, IU y sectores del movimiento vecinal. Y ya desde el primer momento de llegar a la alcaldía, Carmena dejó muy claro que no respondía a los intereses de ninguna organización, solo confiaba en su equipo encabezado por Marta Higueras, nada más ni nada menos que directora de Justicia y Administración Pública en el gobierno del socialista Patxi López.

En noviembre de 2018, Carmena finiquita Ahora Madrid y lanza su plataforma Más Madrid en el ámbito municipal, en cuyo chiringuito quiere aglutinar a independientes que la acompañen en su propio equipo, movimientos sociales y partidos políticos, sin reparto de cuotas. También dice que, en caso de no ganar las elecciones de mayo, no se quedará en la oposición: el puesto de líder de la oposición lo tomaría el numero dos de la candidatura. Esto desencadena la tormenta de sillo nes. Podemos convoca primarias para el Ayuntamiento de Madrid para poder negociar su cuota con Carmena. Y en el último momento, descontentos con los puestos que ocupan en la lista encabezada por el ex Jemad (Jefe del Estado Mayor de la Defensa) Julio Rodríguez (Secretario General de Podemos en el ámbito municipal), seis concejales del Ayuntamiento de Madrid de Podemos deciden apartarse de la candidatura de primarias e incorporarse a la que prepara Manuela Carmena, porque dos de los seis concejales quedaban relegados sin previo aviso a los puestos 11 y 12 de la candidatura ( Ahora Madrid sacó 20 concejales en las anteriores elecciones) y lo consideraban humillante. El ex Jemad Julio Rodríguez solicita la suspensión cautelar de militancia de los seis concejales al tiempo que recuerda que Podemos sigue apostando por Carmena.

El culebrón sigue cuando días des- pués Carmena revela públicamente que el número dos de su candida- tura no será Julio Rodríguez y que si este estuviera interesado en entrar en el gobierno municipal quizás podría llevar el área de Policía. Podemos a través de Pablo Iglesias mueve ficha rompiendo negociaciones con Mas Madrid, anuncia que se echan a un lado y no competirá contra la alcaldesa en la capital.

En estos momentos las cosas quedarían así: después de las negociaciones palaciegas entre bastidores en el Ayuntamiento de Madrid, Carmena, Higueras y los seis concejales suspendidos de Podemos montan Mas Madrid. Podemos no se presenta en las elecciones municipales y llama a votar a Más Madrid.

Sin embargo, en la Comunidad de Madrid, Mas Madrid presentará a Errejón como candidato, mientras Podemos presentará candidatura y competirá contra su antiguo candidato porque según Pablo Iglesias Iñigo «Errejón no es Carmena», aunque habrá que ver de aquí a las elecciones de mayo como queda todo. Ramon Espinar, Secretario General de Podemos en la Comunidad de Madrid acaba de dimitir y los «barones autonómicos» de Podemos reunidos el 25 de enero, reconocen que la forma de actuar de Errejón no es la adecuada pero que hay que seguir negociando para reconducir esta situación, pues no se puede llegar a las elecciones con dos candidaturas de izquierda que compitan entre ellas.

Nos encontramos ante un duelo de «barones» donde prima lo individual por encima de lo colectivo, en el que el programa político pasa a un segundo plano bajo el paraguas de que viene la derecha y el fascismo, cuando la realidad es que ni en Podemos ni en Más Madrid se valora de forma crítica la pérdida de tres diputados y casi 300.000 votos en las últimas elecciones andaluzas. Donde por primera vez en Andalucía un gobierno de derechas con el apoyo del partido fascista VOX gana unas elecciones. No hay ninguna diferencia importante entre la políti ca de Podemos y la de Más Madrid, son unas negociaciones secretas entre la élite sin que las bases de las organizaciones puedan participar en ninguna decisión, sin que existan primarias democráticas con la participación de los que cambian de verdad las cosas e hicieron que en 2011 la derecha mordiera el polvo en el Ayuntamiento de Madrid, los de abajo, los barrios obreros del sur de la capital. El ejemplo más claro de que no hay prácticamente ninguna diferencia política entre esta élite es el hecho de que en el Ayuntamiento Podemos llame a votar a Más Madrid.

Así no se recupera la ilusión, así se va a la derrota electoral. Esto no es la nueva forma de hacer política, es la de siempre contra la que se levantó el 15M y posibilitó un cambio en la situación política basado en lo llaman democracia y no lo es y en el «que no, que no, que no nos representan», la única diferencia importante es ver quien ocupa el sillón.

¿Y Ahora Madrid ? ¿Qué ha hecho durante estos cuatro años?

Lo que empezó como un movimiento asambleario donde las decisiones y el programa se realizaron en asambleas, rápido cambió con la victoria electoral: el Ayuntamiento del cambio demostró que una cosa es ganar a la derecha unas elecciones y otra bien distinta es ganarla. Así en el programa electoral de Ahora Madrid llevaba puntos como: auditoría de la deuda, ningún desahucio, más pisos en la empresa municipal de la vivienda y sobre todo hablaba de Re municipalizar los servicios públicos que el PP había privatizado -como la recogida de basuras y la limpieza viaria en manos de las grandes empresas con beneficios millonarios-. Pues bien, solo como botón de muestra decir que la deuda no se audita, la empresa municipal de la vivienda a día de hoy sigue desahuciando a familias por no poder pagar los alquileres y de la remunicipalización de los grandes servicios privatizados no se hizo nada, sigue en manos de las mismas empresas e incluso renegociando los contratos y dándoles más dinero por ejecutarlos.

Hay que recordar que es el Ayuntamiento de Madrid el que denuncia a los titiriteros con su famosa pancarta de Gora ALKA ETA, el Juez les imputa enaltecimiento de terrorismo ingresando en la cárcel para luego archivar las causas de delito de odio.

Hay que recordar que la persecución contra los manteros sigue hoy en día y que llegó a su máximo con la muerte del senegalés Mmame Mbage perseguido por la policía municipal hasta que cayó fulminado de un infarto.

Hay que recordar que el Plan Económico Financiero del Ayuntamiento de Madrid fue aprobado con los votos de 14 concejales de Ahora Madrid y 20 del PP, con seis concejales de Ahora Madrid que se ausentan del pleno para no votar, porque este plan supone recortar más de 530 millones de euros.

Hay que recordar que la Operación Chamartín está firmada por el Ayuntamiento, el Ministerio de Fomento y ADIF y que supone un verdadero pelotazo para el BBVA, que compra terreno a mitad de precio para edificar en una de las zonas más caras de Madrid. Esta Operación Chamartín era uno de los viejos proyectos del PP cuando tenía la alcaldía.

Hay que recordar que doce concejales de Ahora Madrid junto al PP, C’s y PSOE muestran su apoyo al PP catalán en una declaración de condena a un escrache de la CUP a una sede del PP y que el apoyo al derecho de autodeterminación de Catalunya brilla por su ausencia en la cúpula de Ahora Madrid.

Hay que recordar que el cuestionamiento de la Monarquía ni aparece entre la élite gobernante de Ahora Madrid, no participando ni apoyando en los referéndums que se están haciendo en todas las universidades madrileñas, ni en los barrios.

Hay que recordar que la participación asamblearia cesó al día siguiente de la victoria electoral, que en la Mesa de Coordinación de Ahora Madrid (mesa en la que se decidía la política a seguir y compuesta por representantes de todos los colectivos de Ahora Madrid y los concejales), Manuela Carmena y Marta Higueras solo fueron a la primera reunión para decir que no volverían más.

Todo esto lleva a la abstención en las filas de la «izquierda», siendo los responsables los que llevan a cabo esta forma de hacer política y que muy posiblemente lleve en las próximas elecciones municipales y autonómicas a la victoria de la derecha y al ascenso del fascismo en Madrid. Eso, sin tener en cuenta que ningún cambio político importante puede venir sin fomentar la movilización social, por más que se tenga la mayoría en cualquier Ayuntamiento como lo demuestra la experiencia de Ahora Madrid: el vuelco a las instituciones ha significado el abandono de la lucha en la calle cuando tenía que haber sido utilizar las instituciones como altavoz para llamar a la lucha. concejales suspendidos de Podemos montan Mas Madrid. Podemos no se presenta en las elecciones municipales y llama a votar a Más Madrid.

José Díaz Sánchez de la Blanca
26/01/2019